Jasminum

Familia: Oleaceae

Especies comunes

Jasminum officinale Jasminum beesianum; Jasminum grandiflorum;
Jasminum humile; Jasminum nudiflorum; Jasminum fruticans
Jasminum primulinum.

Nombre común:

Jazmín; guirnalda.

Diversidad, origen distribución y hábitat

El Género está integrado por unas 200-300 especies de plantas arbustivas y sarmentosas procedentes de las regiones tropicales y subtropicales del hemisferio norte.

Características y descripción

Son arbustos, a veces trepadores, con hojas simples o pinnadas situadas en pares opuestos y de carácter caduco o perenne. El verdadero motivo ornamental de los jazmines lo constituyen sus flores, que son de forma tubular y aparecen reunidas en racimos cimosos de tipo axilar o terminal.

Sus colores varían entre el blanco, rosado y amarillo y su época de floración puede ser la primavera o el invierno, dependiendo de la especie. El fruto es una baya de color negro.

2 especies Jasminum; a la izquierda Jasminum officinale de flores blancas y a la derecha Jasminum fruticans con flores amarillas

Cuidados y mantenimiento

Los jazmines son plantas que precisan exposiciones muy soleadas y climas de carácter cálido o templado.

Su desarrollo resulta óptimo en regiones con temperaturas medias
comprendidas entre los 15° y 25° C. Los riegos deben ser ligeros durante el invierno y más abundantes en las épocas de más calor.

Suelo y trasplante:

Requieren terrenos ligeros, sanos y con una buena capacidad de drenaje que, por supuesto, no excluye el que sean capaces de retener bien la humedad. La plantación en el terreno definitivo se lleva a cabo en otoño o primavera, aunque en zonas con clima muy templado puede efectuarse incluso en el invierno.

Abono y fertilización

Ya que necesitan terrenos de una fertilidad media, es conveniente proporcionarles riegos fertilizantes con una cierta periodicidad.

Los jazmines se pueden utilizar como arbustos de flor en el jardín o como plantas trepadoras en terrazas soleadas. Si el clima es frío y su orientación es sombrada conviene que se les proteja plantándolos junto a los muros del jardín o la casa.
Durante las épocas más frías deben resguardarse en el interior de un invernadero. En estas zonas de clima templado-frío se debe emplear la especie J. nudiflorum. ya que es la más resistente.

Control de plagas y enfermedades

Los jazmines son, sobre todo, sensibles a la excesiva humedad del terreno originada por unos riegos demasiado continuados y que suelen provocar la asfixia de las raíces y favorecen la aparición de enfermedades por hongos parásitos.

Reproducción

La multiplicación frecuentemente se lleva a cabo por esquejes de tallo plantados durante el otoño o la primavera. Ver Método de reproducción por esquejes

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